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El mercado de telecomunicaciones de América Central tuvo un desarrollo y explosión entre el 2007-2011, sobre el final de ese período se comenzó a consolidar la posición de los distintos grupos en la región. Asimismo, los mismos operadores tuvieron sus propias consolidaciones en sus modelos de negocios, algunos migrando hacia formatos de multiservicio (como Claro o Tigo), otros centrándose en servicios móviles (Movistar) o reduciendo su participación en la región (Digicel). En ese marco, durante el último año, los reguladores optaron por buscar medidas favorables a los usuarios como la Portabilidad Numérica, como el caso de Costa Rica, o por la incorporación de más competidores en el mercado (como Nicaragua).
Durante el próximo año, en términos generales, el mercado seguirá su camino hacia una estructura de competencia en ofertas multiservicios dentro de las ofertas fijas. El aumento de la penetración de los servicios de banda ancha se mantiene como un desafío inconcluso de la región, que, para finales de 2012, no había superado la penetración del 10% de los hogares. En ese sentido, las distintas iniciativas gubernamentales para potenciar los accesos de banda ancha, como en el caso de Costa Rica, Panamá o República Dominicana, son un paso importante hacia la consolidación del servicio.
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