El jueves 21 de marzo, con algunos ajustes a la iniciativa presentada por el Consejo Rector del Pacto por México, en la Cámara de Diputados fue aprobada en lo general y en lo particular el dictamen de reforma en materia de telecomunicaciones, con 414 votos a favor, 50 en contra y 8 abstenciones. Además fueron descartados más de 90 artículos reservados para su discusión en el pleno.
No pocos expertos telecomunicaciones, reconocidos académicos, así como algunos miembros de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (AMEDI), coincidieron en señalar que la citada reforma constitucional busca reformar el régimen de la radiodifusión y las telecomunicaciones en un entorno más competitivo, plural y convergente, concretando, además, varias aspiraciones de una larga lucha por garantizar el efectivo derecho a la información de los mexicanos.
De acuerdo con lo asentado en el boletín “Celebramos la aprobación de las reformas para telecomunicaciones en la Cámara de Diputados. Exigimos congruencia con esa decisión y seriedad en el Senado” -que la AMEDI dio a conocer el viernes 22 de marzo, se afirma: “Desde la acción de inconstitucionalidad que promovió en 2006 un conjunto de senadores comprometidos con la causa de la democratización de los medios de comunicación en contra de la llamada Ley Televisa, la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y la discusión en contra de las reglas y los resultados de la licitación 21, las organizaciones de la sociedad civil interesados en estos temas fueron ganando batallas que ahora se afianzan con la aprobación en la Cámara Baja de un dictamen que fortalece y amplía el derecho a la información, potenciado por el acceso a las Tecnologías de la Información y la Comunicación”.
En la batalla por reglamentar la guerra entre monopolios (Francisco Vidal), destaca la voz disonante de Andrés Manuel López Obrador, dirigente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), quien señaló que la reforma en materia de telecomunicaciones sólo servirá para que el priísta Enrique Peña Nieto mantenga el control sobre los medios de comunicación y pague por los servicios que recibió de la empresa Televisa. Los diputados –afirmó López Obrador-, aprobaron “una nueva ley Televisa para que la banda de malhechores que malgobiernan México mantengan el control en la televisión, la radio y la prensa escrita, para engañar a la gente y perpetuarse en el poder”.
Los diputados Eloy Martínez y Gerardo Villanueva (PRD), Alfonso Durazo (Movimiento Ciudadano), Arturo López Cándido y Manuel Huerta (PT) también objetaron la reforma, considerándola “tomadura de pelo”, y afirmaron que se pretende instaurar un régimen esclavista. Los legisladores denunciaron que el total de reservas presentadas en la Cámara de Diputados con objeto de modificar el contenido del dictamen con reforma constitucional en materia de telecomunicaciones fueron desechadas en su totalidad, sin crítica ni debate, por el bloque que formaron PRI, PAN, PVEM, Nueva Alianza y parte de las bancadas del PT y el PRD.
Otro crítico del dictamen de reforma en materia de telecomunicaciones es Francisco Hernández Juárez, eterno secretario del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), quien consideró que la reforma a la ley de telecomunicaciones aprobada en la Cámara de Diputados tiene dedicatoria contra Teléfonos de México (Telmex).
Entre los daños colaterales que de inmediato generó la reforma en materia de telecomunicaciones, destaca la caída que resintieron las acciones de Grupo Televisa y América Móvil.
Sin embargo, a partir del viernes 22, el valor de las acciones de América Móvil repuntó, luego de ganar las licencias exclusivas para transmitir los Juegos Olímpicos de Brasil, en 2006, y los juegos de invierno en Rusia, en 2014, para los países de América Latina, con excepción de Brasil, en un nuevo episodio de la guerra entre los monopolios de las telecomunicaciones. Con la alianza establecida con el Comité Olímpico Internacional (COI), Slim arrebata a Televisa y a TV Azteca los derechos de transmisión de los referidos eventos.
Posdata
El viernes 27 de marzo, El Universal informó que “la Mesa Directiva del Senado de la República informó prevé turnar la minuta de telecomunicaciones y radiodifusión a las comisiones de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos Primera, y las comisiones vinculadas al tema como son Comunicaciones y Transportes, así como Radio, Televisión y Cinematografía podrán emitir sólo una opinión. De confirmarse esta ruta parlamentaria, las dos primeras comisiones tendrían la potestad de votar o rechazar la redacción de la reforma enviada por la Cámara de Diputados, mientras que las dos últimas sólo podrán participar en el debate, pero sin la facultad de emitir un voto”. Ello significa que nada aún es definitivo, y todavía podrían presentarse algunas sorpresas…
