Calderón-Obama: Cumbre entre líneas
Uno es el protocolo diplomático y otra es la realidad a puerta cerrada. Los discursos hablan de entendimiento, de cooperación, de compromisos. Son las frases obligadas que se repiten en cada visita presidencial. Pero detrás de tanta diplomacia, está la cruda realidad. La del embajador que no es bien visto, la de las promesas incumplidas, la de las peticiones truncas y los acuerdos fallidos.

