Internet en las elecciones presidenciales.
La variable extraña: la propaganda negra
Octavio Islas [1]
El miércoles 21 de noviembre, en el auditorio del Instituto Federal Electoral (IFE), ubicado en Viaducto Tlalpan 100, Delegación Tlalpan, Ciudad de México, se desarrollaron las actividades del “Seminario Avance Tecnológico y e-democracia en México”.
El principal promotor del seminario fue Antonio Cervantes, coordinador general del Centro para el Desarrollo Democrático del IFE. Luis Carlos Ugalde, presidente del Consejo General del IFE inauguró el acto. En la mesa primera mesa “Sociedad y campañas políticas ante medios alternativos de comunicación”, participamos Gabriela Warkentin –directora del Departamento de Comunicación de la Universidad Iberoamericana-, Diego Molina –directivo de Google México-, Mario Campos –IMER-, Samuel Palma –diputado federal, y Octavio Islas –director de Proyecto Internet-Cátedra de Comunicación Estratégica y Cibercultura del Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México-.
Como comentarista de la mesa se desempeñó el diputado federal Miguel Ángel Jiménez, y como moderador Andrés Albo –consejero electoral del IFE-.
En 2006 tres estudios arrojaron relevante información sobre el empleo de Internet en el desarrollo de las campañas presidenciales: la encuesta “El mito de los efectos de las campañas” –realizado por la firma Parametría-; el estudio “Una radiografía de los sitios web de los candidatos presidenciales” –a cargo del Centro de Estudios de Usabilidad; “La Campaña en la red” –Consulta Mitofsky-.
El 22 de marzo de 2006, Parametría dio a conocer a través de Excélsior el estudio: “El mito de los efectos de las campañas”. De acuerdo con los resultados que arrojó ese estudio, la televisión, la radio y los periódicos representaron las principales fuentes de información que utilizó la ciudadanía que expresó interés por conocer las acciones y programas de los candidatos presidenciales. En el penúltimo lugar fue ubicado Internet.En el mismo estudio se preguntó por la confianza que inspiraban los medios de comunicación en el desarrollo de las campañas presidenciales e Internet fue ubicado en el último lugar entre los medios considerados.
En marzo de 2006, el Centro de Estudios de Usabilidad A.C., dio a conocer los resultados del estudio “Una radiografía de los sitios web de los candidatos presidenciales”. Los objetivos del referido estudio fueron: determinar si dichos espacios son fáciles de usar; establecer si responden eficientemente a las necesidades de los ciudadanos que los utilizan; conocer si permiten realizar eficazmente las acciones y tareas que el usuario requiere; identificar sí el usuario se percibe satisfecho al consultar la información contenida en los sitios web de los candidatos presidenciales. Todos los sitios web de los candidatos presidenciales recibieron una evaluación global no aprobatoria. La mejor evaluación (5.0) fue concedida al sitio web de López Obrador. La peor calificación la recibió el sitio web de Patricia Mercado (4.4).
En abril de 2006, Consulta Mitofsky dio a conocer los resultados que arrojó la encuesta “La Campaña en la Red”. Durante los 30 días previos inmediatos a la aplicación de la referida encuesta, el 8% de los encuestados afirmó haber recibido algún correo electrónico cuyo contenido respondía a propósitos de proselitismo a favor o en contra de algunos de los candidatos presidenciales. El promedio de correos recibidos que respondían a propósitos proselitistas ascendió a 6.6 y, entre 5 y 6 millones de mexicanos recibieron correos electrónicos que respondían a propósitos propagandísticos tres meses antes de las elecciones presidenciales del dos de julio de 2006.El mayor número de correos “positivos” destacó la campaña de Felipe Calderón. En cambio la “propaganda negra” tenía un claro destinatario: Andrés Manuel López Obrador. La propaganda negra evidentemente no se limitó a Internet.
Para evaluar en México el empleo de Internet en el desarrollo de las recientes campañas presidenciales, resulta indispensable referirse a la “propaganda negra”, factor que pudo incidir en el mínimo número de sufragios que establecieron la diferencia “legal” entre Felipe de Jesús Calderón Hinojosa (15 millones 284 votos; 35.89% de los votos válidos), y Andrés Manuel López Obrador (14 millones 756 mil 350; 35.31 de los votos válidos%). La diferencia “legal” entre Felipe Calderón y Andrés Manuel López Obrador fue de tan solo 243 mil 934 sufragios (0.58%).
Incurrieron en objetables prácticas de “propaganda negra” a través de Internet, tanto miembros activos de partidos políticos, simpatizantes independientes, aficionados a la informática como numerosos hackers dispuestos de servir al mejor postor.
El sitio web de López Obrador fue objeto de frecuentes intrusiones de hackers.Una intensa confrontación se libró a través de blogs, destacando El sendero del peje al 2006 [http://senderodelpeje.blogspot.com/] y “El sendero del Mesías” [http://www.senderodelmesias.blogspot.com/].
En recientes comicios -Veracruz y Baja California, particularmente-, podemos advertir que la objetable práctica de la propaganda negra a través de Internet se ha intensificado. La espiral de violencia simbólica que en ello podemos advertir resulta muy preocupante.
Si bien resulta atinado analizar el relevante papel que observan los nuevos medios en el desarrollo de la e-democracia, ¿por qué el IFE programó este seminario un año y cinco meses después de efectuadas las elecciones del domingo dos de julio de 2006? Un oportuno ejercicio reflexivo debió considerarse antes del dos de julio.
[1] Director del Proyecto Internet-Cátedra de Comunicación Estratégica y Cibercultura del Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Director de la Asociación Latinoamericana de Investigadores de la Comunicación (ALAIC). Su correo electrónico es octavio.islas@itesm.mx y su principal blog puede ser consultado en: http://www.espacioblog.com/octavio-islas
