«Vicente Fox fue de 59 por ciento en noviembre de 2006, sin embargo, durante 2007 se le siguió evaluando como buen presidente, subiendo incluso al 66 por ciento en marzo.
Esta evaluación, en septiembre de 2007 ya estaba en 57 por ciento y en octubre en 55 por ciento, la menor cifra desde mayo de 2005 cuando alcanzaba apenas el 54 por ciento (cifra que se recuerda por ocasionar una reversa del presidente en el proceso de desafuero de López Obrador).
En esta ocasión, más que el nivel de aprobación, el dato a destacar es el 43 por ciento de mexicanos que muestran desacuerdo con él, valor superado solamente en cinco ocasiones durante su sexenio.
SU IMAGEN
La imagen como personaje de Vicente Fox se inicia a medir este año al dejar de ser gobernante. A través del TRACKING POLL ROY CAMPOS que permite generar datos trimestrales móviles, observamos el permanente deterioro del saldo de opiniones que genera la figura del expresidente. Después de que en los primeros meses de 2007 obtenía claramente evaluaciones positivas, vemos como en solo seis meses las opiniones positivas disminuyeron 11 puntos y las negativas crecieron ocho puntos, de manera que hoy son más los detractores que los aplaudidores.
SU HONESTIDAD
El atributo que más se ha dañado del expresidente Fox no es la aprobación en su forma de gobernar sino su honestidad, y los resultados son claros; el promedio de ciudadanos que evaluaron “no honrado” a Vicente Fox durante cada año de su gestión nunca sobrepasó el 25 por ciento, sin embargo, hoy el 39 por ciento lo considera “corrupto”.
Quienes más consideran corrupto a Vicente Fox son, por razones naturales, los perredistas y los habitantes del centro del país».
Consultar estudio: fox.pdf
